Hallazgo excepcional
El Tesoro de Villena es un conjunto de 66 piezas de diferentes metales, la mayoría de oro, consistente en cuencos, botellas, brazaletes y objetos de adorno. Entre estas piezas hay un brazalete de hierro y una semiesfera hueca también de hierro, rematada con una decoración de láminas de oro. El hierro de estas piezas es meteorítico.
El Tesoro de Villena
Cráter de Chicxulub
Sin llegar a esos extremos hay meteoritos famosos de un tamaño más reducido: algunos ejemplos se muestran en las imágenes.
 Meteorito Hoba |  Bólido de Cheliábinsk |
 Meteorito de Fukang |  Meteorito de Willamette |
Los meteoritos que más abundan son pequeños desde unos pocos centímetros, con un peso de unos pocos gramos a otros de mayor tamaño y varios kilos de peso. Si están interesados la The Meteoritical Society
ofrece abundante información sobre el tema. Otra web interesante es la MetBase con una base de datos sobre meteoritos y bibliográfica que recoge todo lo relativo a los mismos desde 1942… ¡si Colón levantara la cabeza!
La composición de los meteoritos es muy variada y según la misma se clasifican en pétreos, metálicos y metalorrocosos. Esto es más complejo porque se tiene también en cuenta la procedencia, pero para los fines de este artículo no vamos a entrar en más desarrollo.
Los meteoritos metálicos se componen casi en su totalidad de una aleación de hierro y níquel y aquí hemos llegado a lo que nos interesa en relación con el Tesoro de Villena.
El hierro meteorítico posee níquel en una proporción del 5% o algo mayor mientras que en el hierro terrestre la proporción nunca es superior al 3%.
El Tesoro de Villena está datado como perteneciente a la Edad del Bronce en la que ya era conocida en estas latitudes la metalurgia del plomo, del cobre, del estaño, de la plata y del oro, pero no la del hierro que se desarrolló más tarde.
La cronología de cada etapa de la Edad de los Metales varía según las regiones geográficas pero una buena aproximación que sirva de referencia sería la de datar el tercer milenio a.C. a la Edad del Cobre, el segundo milenio a.C. a la Edad del Bronce y el primer milenio a.C. a la Edad del Hierro.
La metalurgia del hierro comenzó en el año 800 a.C. y el Tesoro de Villena está datado en el Bronce Tardío (1.200 a.C.) por lo que el hierro encontrado en dos de sus piezas ha de ser hierro meteorítico.
En el último número de la revista Trabajos de Prehistoria, los arqueólogos Salvador Rovira Lloréns, Martina Renzi e Ignacio Montero Ruiz, publican una reseña de sus investigaciones sobre las dos piezas de hierro referidas.
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Tomaron unas pequeñas muestras de fracciones de miligramo de ambas piezas que se analizaron con el espectómetro por fluorescencia de rayos X del laboratorio del Museo Arqueológico Nacional y en un espectómetro de masas del Curt-Engelhorn-Zentrum Archäometrie de Manheim (Centro de Arqueometría Curt-Engelhorn), en Alemania
comparando los datos de composición de las muestras con otros análisis realizados de otras piezas en otros lugares, los autores concluyen que:
“Los datos disponibles apuntan a que el casquete y la pulsera del Tesoro de Villena serían de momento las dos primeras piezas atribuibles a hierro meteorítico en la península ibérica, lo que es compatible con una cronología del Bronce Tardío, anterior al inicio de la producción generalizada de hierro terrestre.”
Como despedida de esta entrada dedicada al hierro venido del espacio, incluyo el tema principal de "La Guerra de las Galaxias"
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